Morelia, Michoacán, a 16 de diciembre de 2024.- En las tradicionales posadas mexicanas no pueden faltar la piñata, el ponche de frutas, los tamales y los cuadernillos con los cánticos para dar y pedir posada, los cuales, conforme a la tradición católica, evocan la peregrinación de María y José desde Nazaret hasta Belén en busca de un espacio seguro para el nacimiento del niño Jesús. Sin embargo, ¿sabías que estos impresos tienen más de cien años de existencia?
Según Grecia Monroy Sánchez, doctora en Literatura Hispánica y posdoctorante de la Unidad de Investigación sobre Representaciones Culturales y Sociales (UDIR) de la UNAM, Morelia, durante el virreinato se realizaban representaciones bíblicas de la Navidad organizadas por los frailes evangelizadores. Con el tiempo, estas representaciones se mezclaron con las festividades populares, y las celebraciones pasaron de ser organizadas por la Iglesia a ser replicadas por los fieles en sus comunidades y pueblos.
A partir de este proceso, los cánticos religiosos que celebran la llegada del niño Jesús se hicieron más accesibles y comenzaron a imprimirse en cuadernillos titulados “Novena para los nueve días de jornada de los santos peregrinos” que hasta el día de hoy se distribuyen en mercados y puestos callejeros, previo al 16 de diciembre, fecha en que inicia la tradición de las posadas, que concluyen el 24 de diciembre.
“Sin embargo, antes de esta versión, existieron otras. Conocemos una edición publicada por la imprenta de Cristóbal Velasco a mediados del siglo XIX, pero fue a finales de ese siglo cuando el editor Antonio Vanegas Arroyo, al notar la creciente popularidad de esta celebración, decidió ofrecer su propia versión de los versos para las posadas. Esta versión formaba parte de un impreso mayor titulado Novena para las posadas, cuyas letras siguen vigentes hasta el día de hoy”, explicó Grecia Monroy.
Monroy añadió que, desde esa edición, el impreso popular ha sufrido pocas modificaciones, por lo que el conocido verso “En el nombre del cielo os pido posada…” lleva más de cien años de existencia.
Este texto puede consultarse en las más de cincuenta y cinco ediciones publicadas por Vanegas Arroyo, disponibles en el Laboratorio de Culturas e Impresos Populares Iberoamericanos (LACIPI), dirigido por la Dra. Mariana Masera, a través del portal: https://lacipi.humanidades.unam.mx/ipm/w/Inicio.
Así, el tradicional canto sigue pasando de generación en generación, contribuyendo a la preservación de las tradiciones decembrinas de la posada.