Morelia, Michoacán, a 28 de noviembre del 2024.- La estructura educativa es machista pero la vamos a derribar, aseguró Gabriela Molina Aguilar, secretaria de Educación en Michoacán, pues consideró que supervisores y demás personal educativo aún perpetran prácticas marchistas.
En el marco del evento “Es tiempo de mujeres sin violencia”, la funcionaria estatal consideró que ser feminista es un trabajo de todos los días y es una lucha permanente pues, enfatizó, mientras más herramientas teóricas y jurídicas se tengan, el camino se podrá agilizar para continuar para mayor acceso a las oportunidades.
Las mujeres estamos llenas de historias que no deben repetirse entre las niñas y generaciones futuras, por lo que es fundamental trabajar aún por erradicar la violencia, lograr la autonomía económica y el poder de decisión.
Carmen Escobedo Pérez, subsecretaria de educación básica, recordó que desde hace aproximadamente 30 años se hablaba de romper el techo de cristal que limitaba a las mujeres tener acceso a los espacios de poder, sin embargo, con la llegada de la primera mujer presidenta de la República se marca un precedente histórico.
Recalcó que actualmente el mayor reto es lograr una vida plena libre de violencia, pero con la aportación de las mujeres del ámbito educativo, se pueden lograr grandes avances en la materia. Pidió a las trabajadoras de la educación que acudan a sus ciudades y comunidades para dar pie al cambio desde las infancias.
La docencia es fundamental para transformar a la sociedad michoacana, consideró Alejandra Anguiano González, secretaria de igualdad sustantiva y desarrollo de las mujeres; se debe evitar que las mujeres deserten a la educación, pues ello permitirá una plenitud en su desarrollo.
Que desde las aulas se cuestione el sistema patriarcal, que se presenten las nuevas masculinidades, que se transformen en un centro de debate sobre las acciones que pueden realizarse para que todas las mujeres puedan regresar libremente a casa, tener cargos de representación pública, dijo.