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MensajearKumamoto, Japón, 25 de febrero de 2024. – El gigante taiwanés de semiconductores TSMC recibirá 732,000 millones de yenes (4,860 millones de dólares) adicionales en subvenciones del gobierno japonés para construir una segunda planta de fabricación de chips en el país.
La decisión se produce tras la inauguración de la primera fábrica de TSMC en Kumamoto, en la isla japonesa de Kyushu, el pasado sábado. Esta nueva planta, que se espera inicie la producción en masa a finales de este año, producirá chips más avanzados que los de la primera, incluyendo aquellos utilizados para la inteligencia artificial y la conducción autónoma.
Las subvenciones forman parte del plan del gobierno japonés para reactivar la producción nacional de semiconductores y fortalecer las cadenas de suministro ante las crecientes tensiones con China.
El financiamiento total de Japón a TSMC, incluyendo las subvenciones para la primera planta, podría superar el billón de yenes. La inversión total de TSMC en las dos fábricas, por su parte, superará los 20,000 millones de dólares.
Con una capacidad mensual combinada de más de 100,000 obleas de 12 pulgadas, las dos plantas de TSMC en Japón proveerán chips a compañías tecnológicas y fabricantes de automóviles como Sony y Toyota Motor.
Japón también está invirtiendo en Rapidus, una empresa nacional de chips, que se ha asociado con IBM e Imec para producir chips de última generación en la isla de Hokkaido a partir de 2027.
La expansión de TSMC en Japón es una señal importante del compromiso de la compañía con el mercado japonés y su papel crucial en la industria global de semiconductores.
Esta inversión también es un beneficio para Japón, ya que le permitirá asegurar un suministro estable de chips avanzados y fortalecer su posición en la economía global.
Se espera que la producción de las dos plantas de TSMC en Japón tenga un impacto positivo en la economía local, generando empleos y atrayendo inversiones adicionales.
La construcción de la segunda planta de TSMC en Japón es un hito importante en el desarrollo de la industria global de semiconductores. Esta inversión conjunta entre Japón y TSMC fortalecerá la seguridad del suministro de chips y promoverá la innovación en este sector crucial.
